La Unión Europea (UE) supervisará de cerca el progreso de Noruega en la exploración del lecho marino profundo para la posible extracción de materias primas críticas, en un esfuerzo por reducir su dependencia de China.

Noruega se encuentra entre los primeros países en autorizar formalmente actividades mineras en los fondos marinos de sus aguas, tras el respaldo de su parlamento en enero a planes de prospección de minerales en 280,000 kilómetros cuadrados de su plataforma continental ártica.

"Estaremos vigilantes del desarrollo de la minería en aguas profundas en Noruega y en todo el mundo", declaró Maros Sefcovic, jefe del acuerdo verde de la UE, durante una rueda de prensa. "Noruega es uno de los países que se preocupa mucho por la protección del medio ambiente".

Paralelamente, Noruega firmó un memorando de entendimiento con la UE para el desarrollo de materias primas terrestres, y Sefcovic no descartó una colaboración adicional en el futuro.

Sefcovic anunció que en mayo la UE lanzaría una convocatoria de propuestas para posibles proyectos mineros de materias primas clave en países amigos, como parte de sus planes para proteger sus cadenas de suministro durante la transición a cero emisiones netas para mediados de siglo.

En un intento de reducir su dependencia de Rusia en combustibles fósiles y de China en materias primas clave, la UE ha aumentado su dependencia de Noruega, que cuenta con abundancia de ambos recursos.

Sin embargo, los científicos han condenado la minería en los fondos marinos y han pedido una moratoria, argumentando la falta de datos sobre sus impactos ambientales y climáticos. Jan Christian Vestre, ministro de Comercio de Noruega, defendió la medida.

"Necesitamos extraer más minerales para la transición verde y digital", afirmó. “También estamos hablando de nuestra resiliencia y autonomía estratégica. No queremos depender tanto de países de otras partes del mundo”.