Alessandra Korap Munduruku, quien encabezó una campaña que llevó a las corporaciones mineras a respetar el territorio indígena de su pueblo en la selva amazónica, recibió el Premio Ambiental Goldman.
Ella se encuentra entre los seis ganadores de 2023 de diferentes partes del mundo para ganar el premio por logros y liderazgo de activistas ambientales de base otorgado por la Fundación Goldman con sede en San Francisco.
En mayo de 2021, Anglo American acordó retirar 27 solicitudes de investigación aprobadas para minar en tierras indígenas, según la fundación, incluido el territorio Sawré Muybu de Alessandra Munduruku en 400,000 acres de selva tropical en el río Tapajós.
“El premio reconoce nuestra lucha y le dice al mundo 'Aquí estamos'. Las empresas multinacionales no pueden entrar sin consultar a los pueblos indígenas”, dijo a Reuters por teléfono.
La minera británica dijo que se ha comprometido con la Asociación de Pueblos Indígenas de Brasil (APIB) y la ONG ambientalista Amazon Watch en los últimos años para abordar sus preocupaciones.
“Anglo American no tiene ningún permiso de exploración en bosques primarios o en tierras indígenas en Brasil. Tampoco tenemos planes de hacerlo”, dijo la compañía en un comunicado a Reuters .
Tras la decisión de Anglo American, otras importantes empresas mineras anunciaron que también retirarían los permisos de prospección en tierras indígenas de Brasil, dijo la fundación, un hecho corroborado por el lobby minero brasileño Ibram.
En 2022, por primera vez en décadas, ninguna de sus 130 empresas tenía aplicaciones mineras en territorios indígenas, dijo un vocero de Ibram.
“La exitosa campaña de Alessandra representa un cambio significativo en la responsabilidad del sector privado en torno a la minería destructiva en Brasil en medio de un intenso impulso del gobierno para la extracción en la Amazonía”, dijo la Fundación Goldman en un comunicado.
Lo que hizo que su campaña fuera más notable fue lograr su objetivo durante la administración del presidente de extrema derecha Jair Bolsonaro, quien redujo las protecciones ambientales y abogó por permitir la minería y la agricultura comerciales en tierras indígenas.
Las compañías mineras internacionales han dejado de hacer prospecciones en tierras munduruku, pero Alessandra dijo que su gente todavía enfrenta la amenaza de los mineros de oro ilegales que invadieron su territorio en cantidades cada vez mayores bajo Bolsonaro, mientras que la destrucción de la selva amazónica se disparó al peor nivel en 15 años.
Su territorio Sawré Muybu sigue amenazado por los mineros porque todavía no ha sido reconocido formalmente como reserva indígena. Hizo un llamado al nuevo gobierno de izquierda del presidente Luiz Inacio Lula da Silva para que lo haga con urgencia.
Alessandra, de 38 años, usará el dinero del premio para terminar sus estudios universitarios para convertirse en abogada.
Fuente: Mining dot com