Tom Palmer, actual director ejecutivo de Newmont Corporation, compartió una reflexión pública sobre sus 12 años de trayectoria en la compañía, de los cuales más de seis los desempeñó como CEO, en el marco de la transición de liderazgo hacia Natascha Viljoen, quien asumirá el cargo.
Durante una entrevista con un medio de alcance internacional y en un mensaje dirigido al equipo global de Newmont, Palmer destacó que la seguridad ha sido el pilar central de su gestión, subrayando que la pérdida de una sola vida es inaceptable. Señaló que, a lo largo de su carrera —incluidos los retos enfrentados durante la pandemia de COVID-19—, ha sido testigo de tragedias que refuerzan la necesidad de mantener programas sólidos de Gestión del Riesgo de Fatalidad, acompañados de una actitud permanente de alerta y responsabilidad compartida.
Palmer también resaltó que, durante su periodo al frente de la compañía, Newmont concretó algunas de las adquisiciones más relevantes en la historia de la minería, operaciones que transformaron de manera estructural su portafolio de activos y posicionamiento global.
En el ámbito corporativo, afirmó que el propósito y los valores de la empresa guiaron cada decisión estratégica, con énfasis en la sostenibilidad de largo plazo. Añadió que, tras las grandes transacciones, la integración y racionalización de activos se realizó bajo estándares culturales y operativos que no fueron negociables.
Finalmente, Palmer identificó el desarrollo de talento y la planeación de la sucesión como uno de los aspectos más gratificantes de su gestión. Destacó el legado de liderazgo cuidadosamente estructurado dentro de Newmont y expresó confianza en el desempeño futuro del equipo directivo que asumirá la conducción de la empresa.
Al cierre del año, el ejecutivo agradeció a colaboradores pasados y presentes de Newmont por la oportunidad de liderar una de las compañías mineras más relevantes a nivel global.
