La noche del jueves, un terremoto de magnitud 7.4 sacudió el norte de Chile, a 45 kilómetros de San Pedro de Atacama, región que alberga algunas de las mayores minas de cobre y litio del país. El sismo principal ocurrió a las 21:50 hora local, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), seguido por al menos cinco réplicas de magnitudes entre 4.2 y 5.
El terremoto sacudió viviendas y provocó cortes de electricidad, pero no se han reportado heridos o daños significativos. Entre las operaciones mineras en la zona afectada se encuentra Escondida, la mina de cobre más grande del mundo, propiedad conjunta de BHP y Rio Tinto. Codelco, la empresa estatal chilena, también tiene importantes minas en la región, incluyendo Chuquicamata, Radomiro Tomic, Ministro Hales y Gabriela Mistral.
Impacto en el Suministro de Litio
Chile posee las mayores reservas de litio del mundo, con el 90% en el desierto de Atacama, cerca del epicentro del sismo. Este evento ha generado preocupación por el suministro de litio, esencial para la industria de baterías y exportado principalmente a China. Las operaciones de Albemarle y SQM, los dos mayores productores de litio del mundo, se encuentran en el Salar de Atacama, directamente afectado por el terremoto.
Evaluación de Daños
La Red Chilena de Geociencias informó que, a pesar de la notable magnitud del terremoto y la caída de numerosos objetos, no se considera un sismo de gran intensidad. Han detectado algunos impactos menores en la infraestructura, como carreteras bloqueadas por rocas caídas, pero no se reportan derrumbes de edificios.
El terremoto ocurrió pocas horas después de que el USGS publicara su primer estudio para evaluar el riesgo sísmico global para los suministros minerales. Este evento resalta la vulnerabilidad de las operaciones mineras en zonas sísmicamente activas.
Historia Sísmica de Chile
Chile es conocido por su alta actividad sísmica y está bien preparado para enfrentar estos eventos, lo que generalmente minimiza los daños y pérdidas humanas. Sin embargo, algunos terremotos históricos han tenido consecuencias devastadoras, como el terremoto de magnitud 8.8 en 2010, que causó 526 muertes y miles de millones de dólares en daños, y el terremoto de Valdivia de 1960, el más potente jamás registrado, con una magnitud de 9.5, que generó un tsunami que se extendió por el Pacífico.
Conclusión
A pesar del fuerte terremoto y las preocupaciones inmediatas, las operaciones mineras en Chile parecen haber soportado bien el sismo, con impactos limitados en la infraestructura. No obstante, este evento subraya la importancia de las medidas de preparación y respuesta ante desastres en una región clave para el suministro global de cobre y litio.