En la operación minera moderna, la seguridad ha dejado de ser un simple requisito operativo para convertirse en un valor central de gestión. Así lo demuestra Peña Colorada, que el pasado 27 de mayo celebró una nueva edición de su programa “100% Seguridad”, reafirmando que la excelencia industrial comienza con la prevención y el compromiso de cada colaborador.
La jornada se llevó a cabo en el comedor del Taller de Mantenimiento Móvil, un espacio simbólico que representa el corazón operativo del mantenimiento en mina. Ahí, se reconoció públicamente a trabajadoras y trabajadores que han hecho del cumplimiento de los protocolos una práctica constante, demostrando disciplina y liderazgo en el cuidado mutuo.
Reconocimiento al compromiso operativo
El evento fue encabezado por Enrique Corona, Director de Minas, y contó con la presencia de líderes sindicales, gerenciales y operativos, entre ellos:
Eliazar Lugo – Secretario de Seguridad del Sindicato Sección 281
Joaquín Silva – Coordinador de Seguridad, Dirección de Minas
Verónica Chávez – Gerente de Seguridad
Carlos de Jesús Vega – Coordinador de Relaciones Laborales
Marco Antonio Hernández – Gerente de Mantenimiento Móvil
Durante la ceremonia, se reconoció el esfuerzo y compromiso de los siguientes colaboradores:
Luz Ojeda, Soldadora
Leonardo Romero, Mecánico de Mantenimiento
Jorge A. Ramírez, Supervisor Eléctrico
Aarón Calvario, Mecánico de Mantenimiento
Emilio Valencia, Mecánico de Mantenimiento
Armando Rivera, Mecánico Electricista
Cada uno de ellos representa lo que significa vivir la seguridad como una responsabilidad personal y colectiva, especialmente en entornos de alta exigencia técnica.
Cero incidentes, cero excusas
Lejos de una campaña temporal, “100% Seguridad” es parte de una estrategia de cultura organizacional que impulsa la conciencia operativa en todos los niveles. Bajo la convicción de que el “cero es posible” —cero accidentes, cero excusas— Peña Colorada trabaja cada día para fortalecer entornos donde el regreso seguro a casa sea un derecho garantizado, no un acto de suerte.
Este tipo de iniciativas también reflejan un modelo de liderazgo responsable, donde los logros no solo se miden por producción o rentabilidad, sino por el bienestar y el compromiso humano que sostienen cada operación minera.
