Grupo México (GMéxico), conglomerado dirigido por Germán Larrea, alcanzó el primer lugar en valor de capitalización dentro de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), con 1.146 billones de pesos, superando ligeramente a América Móvil, que se ubica en 1.144 billones.
Las acciones de la minera han tenido un desempeño sobresaliente en 2025, con un avance de 48.59% en el año, y un precio récord de 147 pesos por título, niveles no vistos desde su debut en bolsa en el año 2000.
El impulso se explica principalmente por el repunte de los metales industriales, especialmente el cobre, que es su producto principal. Analistas destacan que el mercado reaccionó también al anuncio del expresidente estadounidense Donald Trump, quien en julio impuso un arancel del 50% a las importaciones de cobre hacia Estados Unidos, situación que elevó las expectativas sobre los precios internacionales del metal rojo.
De acuerdo con GBM Research, la acción de Grupo México resulta atractiva por tres factores clave:
Costo de extracción más bajo de la industria por libra de cobre.
Reservas de cobre más grandes del mundo.
Rendimiento de dividendo de los más altos en el sector para 2025, respaldado por un balance sólido.
A esto se suma la expectativa de un déficit global de cobre, impulsado por la transición energética y el auge de la inteligencia artificial, que requerirá volúmenes crecientes del metal.
Grupo México opera en tres divisiones:
Minería (Americas Mining Corporation): 76.4% de los ingresos.
Transportes (GMéxico Transportes): 19.1%.
Infraestructura (México Proyectos y Desarrollos): 4.5%.
En su portafolio de metales, los ingresos se distribuyen en 28% oro, 32% plata y 11% zinc, de acuerdo con su más reciente informe trimestral.
En el contexto internacional, los precios de los metales muestran un repunte significativo:
Cobre: +18.35% en el año, a 4.77 dólares por onza.
Plata: +54.39%, a 45 dólares por onza.
Oro: +42.99%, a 3,781 dólares por onza.
Con estos resultados, Grupo México consolida su posición como el gigante minero y bursátil del país, reflejando el peso estratégico que tienen los metales en la economía global.
