La industria del aluminio se prepara para una gran ola de metal reciclado, impulsada por la creciente presión para descarbonizarse. Según Jorge Vázquez, director gerente de Harbour Aluminium, el mundo añadirá 22 millones de toneladas de capacidad anual de aluminio reciclado para 2026, con China contribuyendo con 15 millones de toneladas de esta capacidad.

"El aluminio reciclado es el nuevo mineral", afirmó Vázquez en la mayor conferencia de aluminio de América del Norte. Este año, los precios del aluminio han subido un 11%, incentivando a los recicladores a buscar más chatarra. Las fundiciones primarias enfrentan altos costos de energía y materias primas, además de la presión para reducir emisiones.

China ha impuesto un límite a su capacidad de producción de aluminio, y se espera que los precios globales suban cuando se alcance este tope. La producción secundaria puede ayudar a cerrar la brecha, aunque será difícil encontrar suficiente chatarra para abastecer las plantas en expansión. Harbour estima un aumento neto de 6,3 millones de toneladas de producción secundaria en China para 2026, lo que indica que las plantas no operarán a plena capacidad.

En Estados Unidos, se espera que el aluminio reciclado constituya dos tercios del suministro para 2026, comparado con el 45% en 2015. Empresas como Rio Tinto y Norsk Hydro han invertido en el mercado de la chatarra. Rio Tinto adquirió el 50% de Matalco Inc., mientras que Norsk Hydro destinó 85 millones de dólares a la producción de piezas automotrices de aluminio reciclado en Kentucky.

"Nuestros clientes exigen productos con menor huella de carbono", comentó Duncan Pitchford de Hydro Aluminium Metals USA. El reciclaje de aluminio es más económico y consume menos energía que la producción primaria, aunque mejorar la eficiencia en la recolección y procesamiento de chatarra sigue siendo un desafío.

Charles Johnson, director ejecutivo de la Asociación del Aluminio, señaló que reutilizar el material saturado en el mercado reduce la intensidad de carbono en la producción de aluminio en América del Norte. Esta oferta adicional mantendrá el mercado del aluminio en superávit y, junto con las altas tasas de interés, limitará los aumentos de precios en la Bolsa de Metales de Londres, según Vázquez.

Fuente: Bloomberg