• El presidente López Obrador envió una iniciativa al Congreso para que mayoría de instituciones sean absorbidas por Secretarías de Estado.

CDMX.- Luego de un año de ser anunciada, el presidente Andrés Manuel López Obrador por fin entregó a la Cámara de Diputados su propuesta de fusión de 16 órganos desconcentrados del gobierno federal, así como la eliminación de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional Anticorrupción (SESNA) y el Fondo Minero.

La reforma, que adiciona y deroga diversas disposiciones de distintos ordenamientos, tienen como fin el racionalizar la estructura orgánica de la Administración Pública Federal (APF), para eficientar los recursos públicos, agilizar los procesos administrativos y aprovechar los bienes nacionales adecuadamente.

La propuesta plantea que la Coordinación General de la Comar, encargada de atender a los refugiados, pase de ser un órgano desconcentrado de la Secretaría de Gobernación y se convierta en parte de su Unidad Administrativa.

Mientras que la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes también deja de ser órgano desconcentrado para ser parte de la Unidad Administrativa del Sistema Nacional de Desarrollo Integral de la Familia.

El Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas, otro órgano desconcentrado de la Secretaría de Agricultura, pasará directamente a ser parte de la Unidad Administrativa de este organismo; en tanto, el Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura, se integra a la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, órgano desconcentrado de la Secretaría de Agricultura.

El Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera será llevado a la Unidad Administrativa de la Secretaría de Agricultura.

La Dirección General de Educación Indígena, Intercultural y Bilingüe, que funciona como un órgano desconcentrado de la SEP, pasará al Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, al igual que el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas.

Asimismo, el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, pasará de ser un órgano desconcentrado de la Secretaría del Medio Ambiente a ser parte de la Conagua; mientras que el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático pasaría a ser Unidad Administrativa de la Secretaría De Medio Ambiente.

La Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía, pasa a ser Unidad Administrativa de la Secretaría de Energía; el Instituto Mexicano de la Juventud deja de ser órgano descentralizado de la Secretaría de Bienestar y se convertiría en una Unidad Administrativa de la Secretaría del Trabajo.

Así como el Instituto Nacional de la Economía Social pasará a formar parte directa de la Secretaría del Bienestar y el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores ahora se convierte en Unidad Administrativa de la Secretaría de Bienestar.

Al igual que el Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad, que dejaría de ser un órgano desconcentrado y pasaría a la Secretaría de Bienestar.

La Dirección General de Publicaciones deja ser Unidad Administrativa de la Secretaría de Cultura y pasa a formar parte del Fondo de Cultura Económica. Finalmente, el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia se convierte en Unidad Administrativa de la Secretaría de Salud.

Se plantea también la eliminación de la SESNA, para que sea la Secretaría de la Función Pública quien lleve a cabo las tareas técnicas del Sistema Nacional.

Sin propósitos

El presidente argumentó que dicha reorganización permitirá eliminar la dispersión de recursos públicos, para dirigirlos al cumplimiento de las funciones sustantivas del Estado, que consisten en satisfacer necesidades sociales y construir la infraestructura indispensable para el desarrollo nacional.

Refirió que derivado de un análisis institucional realizado en diciembre del 2018, el gobierno federal observó un aparato gubernamental “plagado de instituciones redundantes, con duplicidad de funciones y de oficinas y partidas presupuestales sin propósito o resultados”.

Además de acusar que “la corrupción extendida y convertida en práctica administrativa regular durante el periodo neoliberal, en el que los robos monumentales de recursos fueron acompañados por el dispendio, la suntuosidad y la frivolidad a expensas del erario, han sido la insultante contraparte de la pobreza de millones”.