Raymundo Ceja, quien viajó a Acapulco para asistir a una convención minera, mencionó que personal de Protección Civil acudió al hotel donde se encuentra pero solo avisaron que regresarían a levantar un censo de las personas varadas y una evaluación de daños.
Zacatecas.- ¡Aquí, ahorita, estamos en el infierno! Todo está devastado y estamos incomunicados. A las 10 de la noche comenzó la lluvia y me salí de la convención minera para resguardarme en el hotel, porque había visto la noticia que el huracán Otis impactaría por la madrugada, pero a las 11:30 de la noche ya era un caos: los vientos eran intensísimos, comenzaron a inflarse las puertas y reventarse las ventanas, salimos de los cuartos y nos refugiamos en un salón de fiestas”, relata vía telefónica Raymundo Ceja, un empresario zacatecano que quedó varado en uno de los hoteles de Acapulco.
“Los vientos eran intensos, todo volaba, todo se movía. No hay servicios públicos: ni luz, ni agua, ni señal telefónica, no hay conectividad, pero estoy logrando comunicarme, porque traje a la convención nuestro equipo satelital, debido a que nosotros otorgamos servicios de tecnología a las empresas mineras”.
Incluso, menciona que, ahora, la antena satelital Starlink ha funcionado como puente de comunicación para que más de 100 personas logren entablar comunicación al exterior con sus familias y han comenzado a realizar una búsqueda de los trabajadores varados por cada compañía minera para tener un control de las personas afectadas.
Fuente: EL UNIVERSAL