La salud mental ha recibido mucha atención en los últimos años y se ha acelerado en la era posterior a la pandemia. Desde talleres de manejo del estrés hasta programas de asistencia para empleados, muchas organizaciones están haciendo esfuerzos significativos para apoyar el bienestar mental de sus empleados. Una tendencia emergente que forma parte de esta consideración es el concepto de aptitud mental y algunos expertos dicen que podría tener más relevancia en el contexto del lugar de trabajo que un enfoque genérico en la salud mental de los empleados.

¿Qué es la aptitud mental?

La aptitud mental y la salud mental son dos términos que a veces pueden usarse indistintamente, pero a menudo se refieren a diferentes aspectos de nuestro bienestar. La salud mental es generalmente un término amplio que abarca muchos aspectos de nuestro bienestar psicológico, incluida nuestra capacidad para manejar el estrés, mantener relaciones positivas, hacer frente a situaciones desafiantes y participar en actividades significativas. Puede verse influenciado por una amplia gama de factores, como el entorno, la genética, las experiencias y el estilo de vida.

Por otro lado, la aptitud mental se puede definir como un estado mental en el que puedes manejar de manera efectiva tus comportamientos, emociones y pensamientos. Algunos de los componentes clave de la aptitud mental incluyen la memoria, la atención, el enfoque, la creatividad y la regulación emocional. Así como podemos mejorar nuestra forma física a través del ejercicio y hábitos saludables, también podemos mejorar nuestra forma mental a través de una serie de actividades. El control de la salud mental puede implicar la búsqueda de tratamiento para afecciones como la depresión, la ansiedad, el trastorno bipolar y otras enfermedades mentales, mientras que la aptitud mental se centra más en actividades como la meditación, la atención plena y el desarrollo de la resiliencia para mejorar nuestro funcionamiento cognitivo y emocional. La aptitud mental generalmente se trata de aprender a manejar sus pensamientos y emociones en lugar de dejar que ellos lo controlen a usted.

El contexto laboral

En el lugar de trabajo, la salud mental y la aptitud mental son importantes para el bienestar de los empleados y el éxito organizacional. Los problemas de salud mental, como la depresión y la ansiedad, pueden afectar la capacidad de un empleado para realizar su trabajo de manera efectiva, lo que resulta en una disminución de la productividad, el ausentismo e incluso la rotación. Por el contrario, los empleados con altos niveles de aptitud mental tienen más probabilidades de ser comprometidos, creativos y productivos, lo que puede generar resultados positivos para la organización, como una mayor innovación y mejores resultados comerciales.

Centrarse en la aptitud mental de los empleados también puede reducir los comportamientos inseguros en el lugar de trabajo a través de una mejor toma de decisiones, una mejor comunicación y trabajo en equipo, un mejor manejo del estrés y una mayor conciencia y atención a los detalles.

¿A dónde vamos desde aquí?

Tanto la aptitud mental como la gestión de la salud mental son componentes críticos de un lugar de trabajo saludable y seguro. Decidir si centrarse ampliamente en la salud mental o implementar un enfoque más centrado en torno a la aptitud mental se reduce a comprender realmente las necesidades de la fuerza laboral y lo que genera el mayor retorno de valor. Al hacer de esto una prioridad para los empleados, los líderes pueden crear una cultura de apoyo, compromiso y productividad que beneficie a todos en el lugar de trabajo.

Por: Nikhil Rattan

Nikhil Rattan dirige el programa EHS de Best Buy Canada. Tiene una licenciatura en Ingeniería Eléctrica de la Universidad de Purdue y credenciales educativas adicionales en Recursos Humanos y Salud y Seguridad de la Universidad de Toronto.